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Sebastián Echarry y Carlos González hablan de la Unión de Músicos de Mar del Plata UNMAR, la situación de la cultura a nivel local y los objetivos que se plantean para defender sus derechos como artistas.

“La asociación la creamos hace 10 meses, desde que empezamos a juntarnos, y en los próximos días recibiremos la personería jurídica como asociación civil sin fines de lucro. Esto nos permitirá un mayor desarrollo y entrar en el grupo de asociaciones regionales que pertenecen al Instituto Nacional de la Música INAMU, que aglutina a todas las asociaciones del país”, comienzan diciendo.

- ¿Por qué se asociaron?

- S.E.: UNMAR es una herramienta de gestión colectiva con el objetivo de lograr más fuerza en la defensa de nuestros derechos como músicos, como trabajadores y trabajadoras de la cultura, y también para favorecer el crecimiento de la actividad en Mar del Plata, ya que el Sindicato a nivel local no tiene mucho alcance y en los organismos oficiales, como la Secretaría de Cultura de la Municipalidad, no se trabaja de una manera seria para garantizar los beneficios de los artistas. Sabemos que si nos juntamos 500 o 600 músicos en pos de un interés común, y para facilitar por ejemplo la producción de discos, audiovisuales, las grabaciones, las clases, la difusión, podremos avanzar. Consideramos que el bien colectivo está sobre el bien individual.

- C.G.: Hay mucha desinformación sobre los derechos de los músicos, por eso invitamos este año a Diego Boris, presidente del INAMU, a dar unas charlas en el Instituto del Profesorado de Arte IPA, en un par de encuentros que fueron multitudinarios con músicos, alumnos y docentes. Fueron una suerte de talleres donde vimos los detalles más importantes sobre SADAIC, AADI CAPIF, los derechos fonográficos, el registro en el INAMU, etc., y se distribuyeron 300 manuales de formación para músicos. Nuestra asociación puede asesorar a los músicos a nivel local y acercarle la mayor cantidad de herramientas posibles para fomentarlos. Y no se trata de beneficencia o voluntarismo, porque esto le sirve a UNMAR para aprender y ser una referencia institucional.

- ¿Cómo está la situación en Mar del Plata?

- S.E.: En los últimos tiempos se han multiplicado los espacios, lo que es bueno para que todos puedan tocar, pero también hay que decir que se precarizó el trabajo de los músicos, por el sistema de la “gorra”; y ahora con este “cambio” de gobierno es una situación difícil porque se achican los espacios, hay una retracción de la cultura en general, hay menos circulante de dinero y mayor persecución para que los espacios culturales no proliferen. Es un momento clave para juntarnos y tener una fuerza que nos represente, ante la falta de políticas culturales de los gobiernos nacional, provincial y municipal. La música es parte de la identidad de los pueblos, y la situación nos obliga a convertirnos en gestores culturales para defender esa identidad.

- C.G.: La gente que se fue uniendo al proyecto de UNMAR lo hizo por las acciones emprendidas, y eso es lo bueno y verdadero del trabajo que venimos haciendo, que también es un placer para nosotros. Es increíble la cantidad de adhesiones que se van sumando. Queda claro que es muy necesario un espacio de esta naturaleza en la ciudad.

- S.E.: No somos los únicos que estamos. Por ejemplo, en rock, puedo citar a Músicos Independientes Organizados MIO, en jazz han hecho un gran trabajo la gente de Improvisación Colectiva, ambas agrupaciones con personería jurídica también. Tal vez nosotros hemos reunido a más gente relacionada con la música popular, folklórica, latinoamericana, y de otros géneros de fusión. Nos sentimos parte de un proceso de la cultura, y asumimos esa responsabilidad histórica.

- ¿Cuáles son los pasos inmediatos?

- Los próximos beneficios que va a brindar UNMAR son a través de convenios para obtener descuentos en la compra de instrumentos musicales y clases de capacitación, y en la logística para los shows. Y el próximo mes de noviembre una nueva visita de Diego Boris, esta vez acompañado por Miguel Cantilo para dar un taller de letras de canciones.