Así lo afirmaba Verónica Bogliano –abogada e integrante de HIJOS- en la movilización que se produjo en La Plata en contra del posible beneficio de prisión domiciliaria para el genocida Miguel Etchecolatz. Bogliano remarcó que la desaparición de Jorge Julio López, a casi diez años, aún sigue sin imputados.
Tras la posibilidad de que al genocida Miguel Etchecolatz obtenga el beneficio de prisión domiciliaria, distintas agrupaciones de Derechos Humanos se movilizaron hasta la Cámara Federal de La Plata.
En dialogo con `El Mañanro`, programa radial emitido por FM De La Azotea -88.7- Verónica Bogliano, abogada en el juicio La Cacha y en el circuito Camps, e integrante de HIJOS; señaló que: “en el 2004 Etchecolatz tenía prisión domiciliaria en Mar del Plata y la burlaba. Además, cuando se realizó el allanamiento de esa vivienda se le secuestró un arma. Es un dato alarmante pensar que en los últimos 7 meses se le concedió prisión domiciliaria a más de 50 represores. ”
“La excusa que tenía en ese entonces Etchecolatz eran supuestos problemas de salud. Cuando fue revisado por médicos de un hospital público dieron un diagnostico de buen estado de salud y estado psicológico. Hemos estado expectantes frente a otras situaciones en donde represores no estaban en condiciones de estar en prisión domiciliara, y Etchecolatz no tiene estos problemas,” señalaba Bogliano.
Por último remarcó que: “hasta el momento aún no se decidió nada al respecto de Etchecolatz, puede ser que no se tome ninguna medida en el día de hoy. Desde este lugar vamos a seguir luchando para que los culpables estén detrás de las rejas. A casi 10 años de la segunda desaparición de Jorge Julio López la causa no tiene un curso de investigación y no hay imputados, por lo que no hay ningún tipo de respuesta. La desaparición de López, se produjo en el marco al juicio a Etchecolatz. “
