Page Title. Maximum length 60-70 characters

El dato surge del último informe de Barómetro de la Deuda Social de la Infancia, de la UCA; 800.000 niños viven en viviendas de extrema precariedad, como chapa y cartón.

A fines de 2015 había en la Argentina 4,9 millones de chicos en situación de pobreza por ingreso. Se trata del 40,4 % de la población de entre 0 y 17 años, en hogares que no superan el ingreso necesario para una Canasta Básica de Total (CBT), que incluye bienes y servicios básicos, y que era el año pasado de $ 2.276, mientras que en 2010 llegaba a $ 590. La indigencia, en tanto, alcanzó a 1,1 millones de chicos, el 9,2%, en familias que no llegan a la Canasta Básica de Alimentos, un ingreso que en 2015 estaba valuado en $1089 y en 2010 era de $ 284.

Sin embargo, según el Barómetro de la Deuda Social de la Infancia, elaborado por el Observatorio de la Deuda Social Argentina, de la UCA, esta cifra llega al 56,6% de los chicos, 6.900.000, si se analiza la pobreza multidimesional, que tiene en cuenta 6 dimensiones fundamentales para una vida digna: alimentación, saneamiento, vivienda digna, atención a la salud, acceso a la información y estimulación temprana (de 0 a 3 años)/educación (de 4 a 17 años). Un niño es pobre para el Observatorio de la Deuda Social Argentina (basado en criterios de la Unicef/Cepal 2012) si está privado de al menos una de estas dimensiones, que son básicas y necesarias para su desarrollo.

“Tomando el Censo Nacional de Población, Hogares y Viviendas 2010, había 12.300.00 millones de niños en la Argentina. Si proyectáramos los datos que estima la encuesta del Observatorio de la Deuda Social Argentina a la cantidad de niños que informó el censo, este 56 por ciento de chicos afectados por la pobreza multidimensional se refleja en al menos 6.900.000 niños”, afirma Ianina Tuñón, coordinadora del Barómetro de la Deuda Social de la Infancia de la UCA. Hay 4.296.000 chicos que están privados de una dimensión; 1.608.000 que están privados de dos dimensiones; 480.000 carecen de tres de los seis derechos básicos y 360.000 niños que no viven bajo las condiciones de cuatro de los seis puntos necesarios para su desarrollo.

El último boletín del Observatorio de la Deuda Social Argentina, de la UCA, cuyo adelanto publicó La Nación, hace un balance 2010-2015 sobre la situación de los chicos y adolescentes de 0 a 17 años en 950 puntos de diferentes aglomerados urbanos de la Argentina. Entre los niños y adolescentes se registró una mejora de su situación en 3,1 puntos porcentuales durante 2010-2015, pero la mala noticia es que desde 2011 la incidencia de la pobreza fue en aumento.

El resto de las franjas etarias no fueron tan castigadas por la pobreza como los más chicos. Los jóvenes de 18 a 29 años, llegaron al 31,8% en situación de pobreza, los adultos de 30 a 59 años al 24,8% y los adultos mayores de 60 años en adelante, al 7,6%. En materia de indigencia, también son los chicos los más afectados, mientras que los jóvenes están en un 6,7%, los adultos un 3,6% y los adultos mayores solo llegan al 0,69%.