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En medio de la peor crisis económica, Macri se dedicó a jugar al paddle y mirar fútbol por TV.

 

La palabra que mejor define al desgobierno que encabeza el empresario-presidente Mauricio Macri es: “Mentira”. En medio de la peor crisis económica que atraviesa Argentina en los últimos 17 años, en la que el dólar llegó a los $40, la inflación rondará el 42% en diciembre, la desocupación se ubicará por encima del 12%, y el cierre de PyMes y comercios que se suman al inaccesible precio de la comida, marcan la agenda cotidiana de la angustia popular, se supo que el Primer Mandatario estuvo ausente de las “reuniones de emergencia” del último fin de semana en la Quinta de Olivos, donde se definía el futuro inmediato del país. En esas horas dramáticas, Macri se dedicó a jugar al paddle y mirar fútbol por TV, según dejó transcender el periodista del diario La Nación, Carlos Pagni, en su programa “Odisea Argentina”. Los medios masivos de comunicación son cómplices de esta puesta en escena, que intenta encubrir a un personaje que ya pasó a la historia nacional como el más incapaz y peor de sus presidentes, superando incluso al olvidable Fernando De La Rúa.

El gobierno de coalición UCR-PRO en Cambiemos, se burla de la desesperación y el hambre popular, que ya provocó que un chico de 13 años sea asesinado de un balazo en el pecho, en momentos que cientos de vecinos de distintos barrios de Sáenz Peña, Chaco, salieran a reclamar comida.

En este sentido, se supo que luego del discurso que brindó el empresario-presidente Mauricio Macri, en el que afirmó que “éstos fueron los peores cinco meses de mi vida, desde mi secuestro”, no estuvo presente en las reuniones desarrolladas durante el pasado fin de semana, en la Quinta de Olivos, a pesar de que la cobertura mediática oficialista daba cuenta de su presencia. El periodista de La Nación, Carlos Pagni, precisó que en esas horas, el Presidente se dedicó a jugar al paddle y mirar el partido de Boca Jr. por TV.

A consecuencia del odio instalado por el gobierno de la alianza Cambiemos, y sobre todo, por sus políticas económicas que arrojaron al país al abismo de un infierno económico y social que se conocerá en su amplitud durante los próximos meses, el pueblo argentino ya comienza a dar serias señales de rebelión. Las burlas sufridas por nuestro pueblo en estos casi tres años, volverán como boomerang a cada integrante de Cambiemos, en cada punto del país.