Page Title. Maximum length 60-70 characters

Así lo aseguró el titular de la Asociación de Defensa de Usuarios y Consumidores (ADDUC), Osvaldo Bassano.

 

Hace un mes, el Ente Nacional de Comunicaciones (ENACOM) presentó un recurso de amparo ante la Corte Suprema de Justicia, con la intención de revertir la medida cautelar dictada por la Sala II en lo Contencioso Administrativo Federal, que le permitió a la empresa Telecom aumentar los servicios de telecomunicaciones por encima de lo autorizado por el Gobierno.

Meses atrás, dicha firma hizo caso omiso del Decreto de Necesidad y Urgencia 690/20, que estableció a las telecomunicaciones como “servicio público esencial”, a la vez que prohibía que las subas en el servicio estuvieran por encima de lo autorizado por el ENACOM. Asimismo, creaba la Prestación Básica Universal, lo que garantizaba el acceso a las TICs a la ciudadanía.

En diálogo con Radio Universidad de la UNLaM, el titular de la Asociación de Defensa de Usuarios y Consumidores (ADDUC), Osvaldo Bassano, criticó la postura de la compañía y la decisión que la legitimó: “En algunos casos, los incrementos fueron del 30 por ciento, lo que es una barbaridad cuando ganan el doble y, encima, en una pandemia”. 

“Estas empresas están en contra de los consumidores y agreden y violan el Estado de derecho porque no aceptan las leyes por una codicia de querer aumentar”, cuestionó, y aseveró: “Han cruzado un límite delgado entre el derecho y el delito penal porque están desobedeciendo órdenes judiciales y extorsionando a los consumidores”.

Por eso, consideró sumamente importante que dichas subas no se concreten o bien sean descontadas en próximas facturaciones: “No puede ser que, por su poder económico, estas empresas puedan violar la ley y estar por sobre el derecho”. En ese sentido, hizo hincapié en que las telecomunicaciones se han vuelto imprescindibles, fundamentalmente, en tiempos de pandemia, en que muchos trámites se han comenzado a hacer a distancia y se naturalizó el teletrabajo en varios lugares: “Se pone en riesgo al consumidor porque, hoy, hasta las consultas médicas y las clases se hacen por internet”. (InfoGEI)