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En plena dictadura militar, en marzo de 1979, nacía el Banco Credicoop como resultado de la fusión de 44 Cajas de Crédito Cooperativo.

 

La entidad que preside Carlos Heller es una institución sin fines de lucro cuyo objetivo es brindar asistencia crediticia a las pequeñas y medianas empresas, a las cooperativas y a las empresas de la economía social.

Hoy, con 268 filiales en todo el país, Credicoop es el primer banco privado de capital 100% nacional y el banco cooperativo más importante de América Latina.

“Gracias al esfuerzo y compromiso permanente de asociados, dirigentes, funcionarios y personal a lo largo de estas últimas cuatro décadas, logramos construir una entidad emblemática de la economía social con convicciones inquebrantables y coherencia de ideas”, destacaron en un comunicado, al referirse al aniversario número 40 de la institución.

Fundado el 19 de marzo de 1979, por la fusión de 44 Cajas de Crédito Cooperativo, algunas con más de 60 años de trayectoria, el Banco Credicoop es, desde su origen, una genuina organización cooperativa.

La entidad es dirigida por sus propios asociados, quienes eligen, bajo el principio de “un Asociado, un Voto”, al Consejo de Administración. Además, cada uno de ellos puede participar en la vida institucional del banco a través de las Comisiones de Asociados que funcionan en cada filial y que colaboran con el Consejo de Administración.

Credicoop está asociado en la Argentina al Instituto Movilizador de Fondos Cooperativos y a ABAPPRA (Asociación de Bancos Públicos y Privados de la República Argentina). También es miembro de la ACI (Alianza Cooperativa Internacional) y de la CIBP (Confederación Internacional de Bancos Populares).

Democracia y eficiencia no son incompatibles

“Tenemos una organización de la que estamos orgullosos, que ha podido mostrar que puede ser grande y mantener los principios y los ideales cooperativos. Somos una demostración de un enorme valor para la sociedad y un ejemplo para el país en el que vivimos, pues nuestra trayectoria avala que una conducción democrática es totalmente capaz de gestionar con eficiencia una empresa con 268 filiales en casi todas las provincias, 5.100 empleados, 3.700 dirigentes y más de 1.000.000 de asociados”, señalan con legítimo orgullo.

Pero construir una entidad financiera basada en el principio solidario de ayuda mutua y bajo la consigna de que se puede ser democrático y eficiente al mismo tiempo, nunca fue sencillo y mucho menos lo era cuando surgió el Credicoop, en el marco del plan económico de Videla-Martínez de Hoz, que impulsaba la concentración y, lejos de favorecer al cooperativismo, se proponía liquidarlo.

A estos duros comienzos, y también al presente, se refirió el titular de la institución, Carlos Heller (quien también preside el Partido Solidario) durante la fiesta realizada la semana pasada en Parque Norte para celebrar el cumpleaños número 40 del banco, uno de los varios eventos que se llevarán a cabo en todo el país.

En términos inusuales para el presidente de una entidad financiera, Heller habló de “capitalismo salvaje”, al recordar los tiempos de la fundación del banco y al describir también la realidad que vivimos hoy.

Y también sostuvo que “no nos da lo mismo”, en relación a los dos proyectos de país que se enfrentarán en las elecciones presidenciales de octubre, agregando que él y la institución que lidera apoyan un modelo inclusivo y con justicia social. (IB24)

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