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Por Alejandro C. Tarruella.

 

Atentos y organizados

No tienen valores, solo intereses. La argentina con fuerte presencia peronista los inquieta. Quieren que la irresponsabilidad de Macri y sus empleados jerárquicos, ministros y otros, ahonden la locura del dólar. Los economistas y los medios, periodistas de toda laya o “especialistas”, ponen a la economía como único tema de la vida nacional. Y en días de festín financiero, al negar desde la humanidad hasta los derechos de los ciudadanos, pretenden sentar posición frente al peronismo que lidera el frente político que lidera las elecciones este domingo. Frente a este panorama, recordemos las palabras del presidente chileno, Sebastián Piñera, ante el reclamo de las mayorías populares de su país. Dijo entonces, “estamos en guerra” para encubrir el verdadero mensaje: “les declaro la guerra”. Y eso es lo que hay que evitar.

Frente a los hechos de Ecuador y Chile, se consolidó la idea de que en Argentina no hubo estallidos semejantes, por el colchón del peronismo, el movimiento obrero organizado y las organizaciones sociales. El espacio que Perón definió como el de las Organizaciones Libres del Pueblo. Lo dijeron incluso opositores. Hace meses en rueda de periodistas y otras especies en A24 Rosendo Fraga, cuando uno periodista estigmatizaba al movimiento histórico acusándolo de generar disturbios. Fraga, les explicó que, si no había rebelión en las calles, era debido a la acción del peronismo y las organizaciones.

La filosofa argentina Amelia Podetti, ha señalado que la “crisis, que es percibida y explicada por el pensamiento europeo como una crisis de decadencia, preanuncio de muerte y que genera las más variadas formas de nihilismo, es en cambio percibida desde América como una fractura muy profunda y desgarrante, pero donde potencialmente hay elementos de fecundidad y de vida, que de muerte”. Y ha expresado, en su ensayo “La irrupción de América en la historia” el rol de la unidad para concebir la unidad “en la marcha del hombre sobre el planeta”. “Pareciera que América ha sido preparada, por su surgimiento y su historia, para cumplir una misión esencial en esta etapa de la universalización: proponer una vía de universalización distinta a la de las sociedades supertécnicas, y capaz de contenerla, por su misión y su destino es realizar y pensar la unidad”.

El respeto a la vida en la búsqueda de la unidad parecer ser parte de la tarea a realizar en estos días. Si lo llevamos a la política, pasa por respetar la voluntad popular y recuperar en la unidad del pueblo, la capacidad del pueblo, el gobierno y la dirigencia en camino a transformar el país. Para ello, hay que poner la economía, la salud, la educación, la vivienda, la ciencia, el arte y la convivencia, al servicio del conjunto del pueblo y la sociedad. Ese proyecto precisa de un camino común en paz, que es el que propone hoy el Frente de Todos.

Respeto al voto popular y paz

Por lo sucedido en Ecuador, Chile y Bolivia, está claro que los mercados quieren ahogar en violencia las demandas populares. Una cosa es la movilización popular, otra la violencia. En medio de una crisis mundial que produce lo que el sociólogo uruguayo Vivián Trías llamó “vacío en el imperio”, esos usureros de la vida humana, pretenden encubrir su debilidad mostrando en los enfrentamientos, su poder de destrucción y sinsentido de la vida. El Papa Francisco, ha expresado que “La injusticia y la falta de oportunidades tangibles y concretas detrás de tanto análisis incapaz de ponerse en los pies del otro – y no digo zapatos, porque en muchos casos esas personas no tienen-, es también una forma de generar violencia: silenciosa, pero violencia al fin”. Y el “mercado” el que busca cristalizar ese estado de cosas.

De ahí que se hace necesario prever que, ante la posibilidad de que esos personeros, intentan hacer estallar la violencia en los próximos días, las organizaciones populares de todo tipo, estén alertas para ayudar a evitar incidencias de todo tipo. Así como hasta este presente, los diferentes frentes amortiguaron con ayuda y presencia activa, el aliento a las fracturas y los incidentes difíciles de evitar, hay que establecer cómo actuar para realizar la contención. El objetivo es no dar lugar a lo que se pretenden, que es ponerle precio a la cabeza del gobierno que surgirá de la decisión del pueblo en las urnas. Impedirle el despegue luego de la destrucción y el saqueo macrista. La lógica del mercado, la usura convertida en una kermesse de cotizaciones y tasas usurarias que impiden la producción y el desarrollo de la sociedad, es una lógica del absurdo, ya que procura totalizar la vida en una sola categoría, que arremete contra la sociedad y su vida cotidiana. La insultante guerra de “ofertas”, precios abusivos, publicidad sin límite, pretenden ocultar hoy el hecho histórico de que se acabó por decisión colectiva el oprobio del macrismo.

Así como Macri a acusó al peronismo y al pueblo y le aplicó una corrida financiera, el mercado aumenta la ofensiva con una nueva corrida bancaria y buscan sumar violencia en las calles, y para ellos quiere usar a la misma sociedad como carne de cañón de incidentes que aventuran. De ahí que la respuesta es contener con organización y acción, toda incidencia y abrir las puertas para el que el gobierno surgido de las urnas, pueda iniciar la tarea de la transformación nacional en un contexto regional y continental. Puede suceder o no. Lo importante es prever y estar preparados para actuar por la paz. El próximo paso del pueblo argentino, es acompañar al gobierno que sucederá al que hoy se derrumba, permitir y ser protagonista del camino que dará lugar a la recuperación de la justicia social.  No hay que dar lugar a que se embargue al gobierno antes de asumir y ahogar la alegría popular ante un triunfo histórico.

Fuente: IB24