Andrés Cordeu, referente del Socialismo Marplatense, reflexiona sobre la política y el desarrollo de la ciudad.
“El problema del fracaso de Arroyo y su gestión, lo vamos a tener que solucionar entre todos los marplatenses y batanenses, porque no podemos ignorar que él fue el vehículo que utilizo la ciudadanía, para cuestionar a la clase política local visibilizada como representante de los intereses económicos mas concentrados de la ciudad.
No creo que el 47 % de personas que lo votaron se hayan transformado en fachos, pero está claro que el voto “anti” salió mal. Es momento de pensar como comunidad, qué paso para que Arroyo haya logrado la intendencia, porque no alcanza con cuestionar sus políticas, que por otro lado muchos podíamos conjeturar, pidiéndole que se ponga de pie, como si fuera un problema de voluntad. Arroyo es Arroyo, y hoy está allí fracasando, porque otros fracasaron antes.
Mar del Plata hace tiempo que no tiene un plan para su desarrollo armónico y sus gobernantes recientes, enajenaron los recursos y el patrimonio del estado municipal en favor de sectores privados concentrados. El contraste de desastres no es el camino. En su lugar habría que plantear si los marplatenses estamos dispuestos a desandar la ruta que dejo al municipio sin capacidad para resolver los problemas de sus vecinos. Esto es algo bien concreto.
¿Están dispuestos los candidatos que se postulan a dejar de admitir iniciativas privadas que entregan el patrimonio municipal a cambio de nada? ¿Están dispuestos a derogar las ordenanzas que eximen de impuestos a los sectores más rentables de la economía local, porque arreglan un hotel o un monumento histórico? ¿Están dispuestos a cobrar los impuestos y tasas a los poderosos?
Estos y otros puntos, podrían devolverle capacidad operativa al municipio de General Pueyrredon, para poner a las políticas públicas en sintonía con las necesidades de su pueblo”.
